Este blog procede de un artículo publicado en LinkedIn por Kathryn Sarnecki, Vicepresidenta de Reurbanización y Gestión Portuaria de la Autoridad Portuaria de Saint Paul.

Contribución económica

El río Misisipi sigue siendo un motor económico para la ciudad de Saint Paul y el estado de Minnesota. Conecta a los agricultores de Minnesota con el mercado mundial, actúa como centro multimodal para el transporte de productos, ofrece puestos de trabajo bien remunerados con escasas barreras de acceso y contribuye positivamente a la base impositiva. Sin embargo, la navegación fluvial sigue rodeada de misterio en nuestra comunidad.

A menudo me sorprende la cantidad de gente que no sabe que Saint Paul tiene un puerto fluvial activo. Ven barcazas que suben y bajan por el río, y ven negocios situados a lo largo de las orillas, pero nunca relacionan ambas cosas. No reconocen que en el río se desarrolla una importante actividad comercial, cuando en realidad Saint Paul tiene el mayor puerto fluvial del estado. Yo estimaría que en 2018, aproximadamente 7 millones de toneladas de mercancías pasaron por el puerto de Saint Paul.

Si no fuera por el transporte fluvial, los productores de Minnesota no serían tan competitivos en el mercado mundial. Según el Departamento de Transporte de Minnesota, más del 50% de las exportaciones agrícolas de nuestro estado se realizan a través del río Misisipi, desde Saint Paul hasta el Golfo de México. A continuación, las barcazas se trasbordan a buques oceánicos y se envían a sus destinos internacionales finales. Las mercancías se envían a países tan lejanos como China, Colombia, Japón y Corea del Sur.

Ventajas de navegar por el Misisipi

Según el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos, "las barcazas son muy adecuadas para el transporte de grandes cantidades de productos básicos a granel y materias primas a un coste relativamente bajo. Se trata de materias primas o productos principalmente manufacturados que suelen almacenarse para su posterior procesamiento o consumo, o transbordarse para mercados de ultramar". En Saint Paul, las principales importaciones son fertilizantes, cemento, áridos y sal para carreteras. Las principales exportaciones son la soja, el maíz, los cereales, el trigo y la chatarra.

La eficacia del transporte fluvial, unida a una racha de 10 años de crecimiento económico, ha provocado un aumento de la demanda en el mercado. Todos los meses recibimos llamadas de empresas que quieren alquilar espacio en el río, un espacio que no tenemos disponible. Como respuesta, nos hemos vuelto creativos y hemos puesto en contacto a los cargadores interesados con los inquilinos actuales. Ahora tenemos inquilinos que aprovechan al máximo sus instalaciones explotando terminales intermodales que proporcionan valiosísimos servicios de transbordo, almacenamiento y manipulación de productos ajenos.

Retos actuales en el río Misisipí

En la actualidad, nuestra mayor necesidad es la financiación de infraestructuras. Gran parte de nuestra infraestructura ha llegado al final de su vida útil y cruzamos los dedos para que cada temporada de transporte se desarrolle con normalidad. Nos gustaría ser más proactivos en las reparaciones y mejoras de nuestros sistemas. Estamos buscando financiación para múltiples proyectos a nivel federal, estatal y local.

Nuestro mayor éxito llegó a través de la Asociación de Puertos de Minnesota, que incluye a la Autoridad Portuaria de Saint Paul, la Autoridad Portuaria de Duluth Seaway, la Autoridad Portuaria de Red Wing y la Autoridad Portuaria de Winona. Juntos, abogamos por la financiación de infraestructuras en la legislatura de Minnesota. En 2018, se concedieron 5,2 millones de dólares al Programa de Asistencia para el Desarrollo de Puertos, gestionado por el Departamento de Transporte de Minnesota. Todos los miembros de la Asociación de Puertos tuvieron la oportunidad de solicitar subvenciones con cargo a estos fondos.

La Autoridad Portuaria de Saint Paul tuvo la suerte de recibir 2 millones de dólares para modernizar la Terminal de Barcazas Uno con una nueva estación de carga. Tenemos un inquilino que invertirá otros 7 millones de dólares en el emplazamiento. Y aunque este es un buen comienzo, se necesitan inversiones públicas y privadas adicionales para satisfacer las necesidades futuras de infraestructura y mantener a Minnesota como un nodo de carga clave en la nación.